Estamos en tiempos de grandes transformaciones en nuestra vida diaria, en las relaciones familiares, en el trabajo, y nuestra vida social. Nos ha cambiado la vida cotidiana, cómo el teletrabajo, las clases virtuales, las compras on line, los cumpleaños por zoom, enfrentar el encierro y la nueva convivencia familiar, las emociones, etc, pero también es cierto que a medida que nos vamos adaptando a esta nueva realidad, vamos cambiando nuestras necesidades, lo que plantea nuevos desafíos para todo el mercado: saber qué necesitan ahora nuestros consumidores, cuáles son sus prioridades y cómo las empresas y organizaciones deben ir adaptándose a estos nuevos requerimientos.
Las personas hoy se encuentran muy interesadas, ante el desconcierto que sienten, en todo lo que tenga que ver con las últimas noticias gubernamentales, sobre medidas que se tomarán, sobre la situación actual, sobre los servicios disponibles o no, sobre toda información que los ayude a saber cómo estructurar una nueva vida, lo cual es bastante difícil porque esta información varía de manera muy rápida según vaya o no mejorando la situación respecto al covid 19. Esto hace que se busquen emisiones en directo de conferencia de prensa, y toda noticia que los pueda ir guiando.
De allí que necesiten acceder a productos alimenticios básicos,productos que se puedan congelar, sobre el servicio a domicilio o delivery, sobre las compras online, sobre productos saludables, por ejemplo, se han hecho expertos en elaborar pan casero, pasta casera, postres caseros y lo evidenciamos en las redes sociales donde cada vez son más los usuarios que suben fotos de sus logros culinarios.
En este período, donde mucha gente se ve enfrentada al desempleo, buscan mejorar su formación a través de la formación digital (home learning), a través de cursos cortos, prácticos que les permitan obtener nuevas competencias, así como diplomas que los habiliten para una rápida inserción laboral. El mundo laboral ha ido transformándose, la idea del “trabajos para toda la vida” ha ido desapareciendo, por lo que la formación continua es parte de nuestra vida para mantenernos activos laboralmente a partir de la búsqueda de trabajos de corta duración, zafrales o teletrabajo en Uruguay, entre otros.
Con respecto al teletrabajo se hace necesario contar con las condiciones tecnológicas necesarias para llevarlo adelante, por eso el aumento en la compra de implementos adecuados que los ayuden a vivir sus jornadas de una manera más placentera y segura, como sillas de oficina, mesas de oficina, mesas para computadoras, implementos que ayudan también a sentirse que en ese momento es “el” momento de trabajo, con todos los elementos necesarios para realizarlo, incluidas las infusiones (cafetera, jarras eléctricas, etc). Pero lo más importante diferenciar la jornada laboral de su vida familiar o su tiempo libre.
En ese intento de llevar el exterior a la casa de cada uno, genera la necesidad de crear rutinas de actividad física que ayude a neutralizar los efectos negativos del sedentarismo a través de una rutina de ejercicio físico en casa. Quienes disponen de espacio en su hogar, intentan simular gimnasios con bicicletas fijas, caminadores, mancuernas. Los que no disponen de esta opción buscan clases en redes sociales en vivo o programas que ofrecen rutinas de ejercicios físicos.
El tema de la pandemia ha hecho que las personas se ocupen más de los cuidados personales. Los usuarios buscan información e ideas para mantenerse sanos física y mentalmente. Ejemplo de esto es el incremento que se ha dado en la búsqueda de ejercicios de yoga, meditación, psicólogos o psiquiatras que ofrecen sus servicios de manera voluntaria, etc.
Sin duda alguna, esta crisis sanitaria ha demostrado que el pago de los bienes también se puede hacer de manera virtual, las personas tienen miedo a compartir dinero físico pues al pasar “por varias manos”, hay más posibilidades de contagio, lo que aumentará esta forma de pago. Por eso es importante facilitar formas de pago mediante tarjetas de crédito, débito, pago por web, etc.
Asimismo, las filas y aglomeraciones son una dimensión de esta nueva realidad que es una preocupación y temor para las personas, atrás quedaron los eventos públicos multitudinarios, las personas tratan de alejarse de lugares donde se encuentran muchas personas reunidas, tratan más bien de que las reuniones sean virtuales.
Los smartphones ya eran muy utilizados, pero hoy se hacen imprescindibles para todas las personas ya que les permite realizar múltiples tareas y estar mejor conectados con sus familiares, amigos y hasta con los equipos de trabajo, así como el acceso a la información en tiempo real de lo que está pasando en cualquier parte del mundo
Estas tecnologías virtuales han permitido el crecimiento exponencial del e-commerce, ya que las compras se hacen a través de celulares o computadoras sin ningún tipo de complicación, evitando tener que trasladarse y estar en lugares que pudieran presentar gran número de personas.,
La lógica obsesión por la limpieza, por saber las marcas de los productos que definen como los mejores para desinfectar, los artículos de asea han sido uno de los productos más vendidos durante esta pandemia, lo que demuestra que las personas están preocupadas cada vez más por la limpieza de su hogar, tendencia que continuará en el futuro, así como el uso de tapabocas, guantes, entre otros
La telemedicina llegó para quedarse, irán utilizando este servicio para obtener la opinión de un experto en la salud sin tener que salir de su casa, ni trasladarse a los centros de salud, ya que los ven como un espacio de posible contagio.
Finalmente, esta es nuestra nueva realidad que entramos sin previo aviso, quizás en Uruguay estábamos más preparados de lo que imaginábamos, aun para los que hacen futurología, este era una realidad impensable. Es un cambio social que nos enfrenta a la construcción de una nueva sociedad entre todos, es un nuevo aprendizaje donde las instituciones de educación tenemos muchos que aportar.
Directora de Facultades y Miembro del Rectorado